Desde el año 2003, cada 28 de Abril se celebra el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, cuyo objetivo es promover el trabajo seguro, saludable y digno. El tema de la campaña de este año es “Estrés en el Trabajo: Un reto colectivo”.
Para la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el estrés es la respuesta física y emocional dañina causada por un desequilibrio entre las exigencias percibidas y los recursos y capacidades percibidos de un individuo para hacer frente a esas exigencias.
La Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo publicó en el año 2000 que las causas de estrés más comunes en el entorno laboral eran: falta de control sobre el trabajo que se realiza, monotonía, plazos ajustados, trabajo a alta velocidad, exposición a la violencia (acoso psicológico o sexual) y peligrosidad. Actualmente los cambios en las relaciones laborales y la recesión económica, han dado lugar a la reducción y fusión de plantillas, lo que ha supuesto un aumento de las cargas de trabajo, modificación de horarios y en muchos casos ambigüedad de roles. A esto hay que sumarle el miedo a la pérdida del empleo, la inseguridad laboral y el trabajo precario como factores estresantes.
Existe una relación directa entre el estrés y el deterioro de la salud. Éste contribuye al desarrollo de trastornos mentales y de comportamiento como ansiedad, depresión, burnout (agotamiento), etc. y daños físicos como trastornos músculo-esqueléticos y enfermedades cardiovasculares, siendo un nuevo factor de riesgo en las enfermedades del corazón.
Síntomas físicos:
Se pueden dar varias a la vez. Si se prolongan en el tiempo, pueden dar lugar a consecuencias más graves.
El estrés, además, da lugar a conductas de afrontamiento no saludables como alto consumo de alcohol, aumento del consumo del tabaco, menor actividad física y alimentación desequilibrada, que contribuyen a aumentar los trastornos del sueño y la obesidad. Todos estos factores son claves en el desarrollo de enfermedades como el cáncer, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
Por todo ello, aprender a controlar el estrés es fundamental para prevenir estas enfermedades.
En situaciones complejas: terapia psicológica y/o farmacológica.
Un ejercicio relativamente sencillo de control de la ansiedad es la respiración abdominal.
Fuentes
Estrés en el trabajo Organización Internacional del Trabajo.
Estrés y riesgo cardiovascular. Fundación Española del Corazón.
Estrés y ejercicio . Fundación Española del Corazón.
Estrés, enfermedad cardiovascular e hipertensión arterial. Revista Medicina Clínica
Riesgos psicosociales y estrés en el trabajo. Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo
Higiene del sueño Guia Salud
Respiración abdominal. El Blog de Rosa